Hora de mostrar tu verdadera personalidad, no importa a quien le duela

Luego de varios años de destrucción provocadas por el Rey, un grupo de seis individuos va a detenerlo finalmente - entre ellos M, C y W -. En lo más alto de una montaña, lo encuentran.

Su sonrisa retorcida, sus ojos tenebrosos - esclerótica negra con el iris amarillo - es lo que aterra a este grupo. Pero tienen un plan, acabar con esa oscuridad finalmente y traer de vuelta a aquél Rey bondadoso que siempre fue.

(C1) Luego que el Rey ve a esas seis personas va tras ellas, iniciando así una lucha. No se sabe quien ganará, la fuerza del Rey es absoluta, producto de haber luchado y vencido numerosas veces. Su odio lo hace implacable, deseoso de ver correr sangre.

Cuando parece que todo está perdido, M saca su guante, cuyos poderes permite dividir a dos entidades fusionadas y separa al Rey de su lado oscuro. W, C y B lo sostienen. El lado oscuro no puede levantarse, ya que su fuerza se disminuye.

¡Qué bueno que estés bien! - Le imploran al Rey que está finalmente levantado - Ahora, destruye a esa entidad de una vez por todas.

No me destruyas, sabes cuál fue mi origen - La entidad oscura le ruega - Juntos podemos hacer grandes cosas.

¡No lo escuches! - Grita B - ¡Mira la destrucción que juntos ocasionaron! No lo vuelvas a hacer, por favor.

Durante mucho tiempo estuve encerrado en mi oscuridad - Dice el Rey - sentía la satisfacción de destruir a todo aquel que se cruzara en mi camino. La oscuridad fue ocasionada por esa gente que se suponía me quería. Forjé mi máscara para evitar que saliera y no sirvió. Confíe por mucho tiempo en torpes que solo querían mi destrucción. Lo sé, cometí errores y como hombre debo hacerme cargo de ellos. Debo aceptar mis propios pecados y eso implica que no volveré a usar esa máscara nunca más. No ocultaré mi verdadera identidad, mi personalidad.

Por eso, sé lo que debo de hacer. Como alguien capaz, alguien que sabe la definición entre bien y mal - Continúa mientras todos lo ven perplejo - ¡Tú, ven acá! - señala a la entidad oscura - Es hora de unirnos de nuevo, esta vez yo tomaré el control y tú me obedecerás.

Gané - La entidad oscura sonríe y se fusiona con el Rey. Una ráfaga de luz los oculta. Cuando todos pueden ver, aparece el Rey, con una forma nueva, sin una máscara (que ahora tiene en la mano) o un hueco en el pecho. Los ojos siguen intactos. - Ahora juntos, nadie nos hará daño - destruye la máscara que tiene en su mano - Es hora de hacer algo mejor, para todos los que quiero y para mi y hacerme cargo de mis errores, de una vez por todas. ¡Vámonos!

Y así, el Rey se va. Junto con ellos, va M, C, W y B. Los demás quedan incrédulos, sin aceptar la realidad y con lágrimas entre los ojos.

¿Lo que hiciste fue lo correcto? - Pregunta M -

Lo fue. - Responde el Rey - No puedo permitirme sufrir, y tampoco puedo permitir a quienes amo que sufran. Si para ello debo aceptar mi verdadera identidad y abrazarla, que así sea. Supongo que estás acá para acompañarme, pero te lo pregunto, ¿estás dispuesta a seguirme?

Hasta el fin del mundo - M, C, W y B responden al unísono -

Perfecto. Ahora el mundo será nuestro finalmente. - El Rey sonríe al cielo -

Nota: c1 indica que la historia se vuelve más animada si escuchas la canción:  Hiroyuki Sawano, The Warriors "Suite" de la banda sonora de Shingeki No Kyojin Temporada 2